El capricho es de esos sitios que una
vez que pruebas su chuleta de buey premium te quedas con ganas de volver,
nosotros esa parte ya la hicimos un año atrás, y considerando que no es barato,
disfrutamos de su carne, que algunos dirán que está caducada, qué es vaca
vieja…Lo que quieras, pero a nosotros nos parece increíble su sabor.
Esta vez íbamos a algo más normal,
unos entrantes y después un segundo para cerrar con un postre, que aún recuerdo
el año anterior con el empacho que marche de carne.
Comenzamos con dos medias raciones de
carpaccio de entrecot madurado 180 días y tartar clásico, este último nos
pareció muy bueno, fresco y con sabor, todo lo contrario que el carpaccio de buey
que nos decepciono totalmente, más bien no sabía a nada.
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| Carpaccio de entrecot madurado 180 días |
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| Tartar clásico |
Continuamos con los segundos platos,
entraña con zanahorias en salsa de mantequilla y miel; solomillo de buey con
mantequilla de boletus. Lo que hablaba anteriormente, muy buen producto, una carne
que casi no hace falta cuchillo para cortar y ya no digamos nada de su sabor.
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| Entraña con zanahorias en salsa de mantequilla y miel |
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| Solomillo de buey con mantequilla de boletus |
Cerramos la velada con dos postres,
otra vez repetimos el clásico de torta de chicharrón de buey y tarta de
chocolate, ambos platos como siempre, muy buenos.
Después de cenar nos ofrecieron visitar su bodega, a lo que accedimos gustosamente donde pudimos ver la última remodelación con una sala espectacular rodeada de vinos.
En fin, un sitio que tiene mucha gente a
favor y también mucha en contra, nosotros creemos que tiene un buen producto,
aunque caro, la fama le precede y si gente entendida en este mundillo dice que
posiblemente sea la mejor carne del mundo, quien somos nosotros para decir lo contrario.
Volveremos.
Noviembre 2018
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