UN CLÁSICO QUE VUELVE A RESURGIR. Valoración sobre 5: 4
Este restaurante es de los de
siempre, un clásico en el barrio húmedo donde hace muchos años fue un referente
de gastronomía en León y donde se celebraban muchos eventos por su gran salón.
En los últimos años había pasado desapercibido pero una nueva dirección y
remodelación, unido a una cocina clásica, pero con sabor y cantidad, hacen de
este icónico lugar vuelva asomarse a los sitios preferidos para los
leoneses. Con un menú del día, otro menú especial de 25€ y carta.
Nosotros hacíamos una visita familiar
y no sin miedo de que nos pudiera defraudar, pero finalizamos la comida pensando en
cuando volver.
Para comenzar, una ración de cecina, un buen plato y una cecina de bastante calidad.
Ración de cecina |
Continuamos con los segundos para
cada uno, solomillo con patatas y pimientos, chuletillas de ternera, bacalao a
la Vizcaína, carrillera y cachopo. Todos los platos de cantidad y calidad, para
mi el cachopo a lo mejor estaba un poco duro, pero no puedo decir que estuviera
malo.
Solomillo con patatas y pimientos |
Chuletillas de ternera |
Bacalao a la Vizcaína |
Cachopo |
Para acabar los típicos postres de
siempre sin grandes sorpresas, pero buenos, flan, tarta de zanahoria o crema de
limón.
Postres |
En general sin ser de mis preferidos,
creo que hace una buena cocina casera, que a gente más clásica siempre les
convencerá.
Una pega, debería de tener la carta
en internet ya que se están limitando ellos solos a los menús cuando podrían
tener más salidas.
Noviembre 2018
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