Pues este 1 de Mayo, día de la
madre y del trabajador, queríamos probar un restaurante que a la gente con la
que había hablado siempre habían dicho que les había gustado, pero a veces
no siempre es igual y esta vez me tocó a mí el lado negativo de la comida.
Reservamos para un menú especial
para ese día que era lo único que se servía, por 22€, entrante,
pescado, carne, postre, bebida y café.
De entrante nos pusieron, patatas
a la importancia con crema de jamón, bueno lo de este primer plato es
impresentable, no reúne los mínimos para este menú, cuatro trozos de patata
rebozada la cual estaba fría y dura con una crema de jamón la cual sabor a ello
yo no encontré ni ninguno de mis acompañantes, nos pareció a toda la mesa un
plato penoso.
Patatas a la importancia con crema de jamón |
Después de estar ya un poco
mosca, pero esperando que con los demás platos mejorará el asunto, nos trajeron
el pescado, salteado de rape y gambas en hojaldre sobre crema de mar, que decir
de este plato….Empezamos con que lo tuvimos que devolverlo porque todos
menos uno estaban fríos, y éramos cinco, la “crema de mar” más bien de patata, de lo frío que estaba ya estaba pegada al plato, bueno una vez nos lo trajeron templado,
nos dispusimos a probarlo, nada especial con muy poco sabor, cuatro trocines de
rape con tres gambas y poco mas (acompaño foto), este plato nos dejó totalmente
indiferentes.
Salteado de rape y gambas en hojaldre sobre crema de mar |
Ya un poco decepcionados porque
no estaba siendo una buena comida, nos dispusimos a disfrutar de la carne,
medallón de solomillo ibérico, guiso de hongos y patata duquelle, como
pensareis este estaría igual de mal que lo anterior, pues sí. Un trozo gordo de
solomillo de cerdo, vamos a dejar lo de ibérico, con unos champiñones y setas de
bote con una salsa que no sabía a nada, acompañado de dos patatas duquelle que
como las tendrían echas de por la mañana y las meterían en frigorífico, pues
estaban frías y duras, ósea que otra si se me permite la expresión “cagada” de
plato, bueno este si estaba caliente…..Aunque yo estaba un poco más que el
plato.
Medallón de solomillo ibérico, guiso de hongos y patatas duquelle |
Para terminar esta comida nos
quedaba el postre, buñuelos rellenos de mousse de moka, aunque más bien se tendría
que llamar, “buñuelos rellenos con un montón de canela” porque moka tenían
dentro, pero como venían espolvoreadas con mucha canela se le comió el sabor de
la moka, la canela.
Buñuelos rellenos de mousse de moka |
Ya para finalizar nos entraba el
café en el menú y cuando nos fueron a servir el café, mi padre le pidió si era
posible poder echar un chorrito de orujo blanco con el café, el camarero
muy atento le dijo que si, aun estamos esperando por el….
En conclusión una muy mala
experiencia en esta hospedería, la cual fama tiene, pero o se vieron rebasados
por el día que era o no se puede entender que un menú de 22€ haya sido tan
penoso, con patata fría y dura, pescado frío, solomillo sin sabor y postre
penoso, además siendo el día que era, día de la madre, que menos que dar una
rosa o un clavel, hasta en el sitio más cutre este día te lo hacen.
No se si le volveré a dar la
oportunidad, mucho me lo tendré que pensar, ya que también deben tener un menú
degustación por 28€ pero viendo esto no se si quiero.
Como digo siempre la mejor opinión
la tiene cada uno, yendo y probando.
No le puedo dar más valoración de
un 1 sobre 5 porque no se la merecen.
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